¿Cómo una serie de hechos ¨desafortunados¨ puede hacer que una amistad (casi hermandad) entre dos hombres pueda alienarse completamente?
El dramaturgo estadounidense Keith Huff creó una obra intensa, dramática, emotiva y visceral. En la misma dos policias (que se conocen desde chicos) acostumbrados a trabajar “hombro con hombro” en pocos dias vivirán una seguidilla de dramáticos episodios, los cuales los pondrán a prueba psicologica y moralmente, además de poner en riesgo a la familia de uno de éstos.
Con una estructura dinámica, en primer instancia. los personajes se presentan ante el público, pero rapidamente llegará la accion, en ese espacio se evocarán y desarrollarán alguno de los episodios que los marcarán para siempre. A modo de una ¨confesión¨ cada uno dará su particular versión de los hechos, los cuales tienen notorias diferencias según quien lo cuente.
Javier Daulte asume la direccion del espectáculo y propone una interesantísima propuesta escenica. En primer lugar maneja exquisitamente la compleja estructura de la pieza, aprovechando al maximo los distintos elementos que confluyen en la misma, y logrando un ritmo agil, en donde la tension va in crescendo hasta el momento del (inesperado) descenlace.
Otro gran acierto es el espacio en donde decidieron que se desarrolle la obra: un inmenso galpon/taller abandonado, el cual constantemente se irá metamorfoseando según la necesidad. Impecable trabajo de Alberto Negrin, en donde tambien se aprecia el diseño luminico de Albert Faura.
Pero otro de los grandes pilares de esta propuesta son las interpretaciones del brillante duo actoral. Joaquin Furriel demuestra una vez más el gran crecimiento interpretativo que está pasando (primero en Rey Lear, y hasta hace poco en La vida es sueño) compone aquí a Rodo, soltero, alcoholico, sumiso, el cual practicamente convive con la familia de su amigo, las circunstancias harán que este deba cambiar su posicion en la vida, se destaca dicho cambio – el cual lo realiza gradualmente – y es notable dicho recorrido, mostrando distintas coloraturas a cada uno de los momentos de éste personaje. Como contracara Rodrio de la Serna interpreta a Dani, padre de familia, violento, que ¨escupe¨ todo lo que piensa, y que cuando su familia corre peligra, su instinto ¨animal¨ sale a flote para buscar a los responsables. Nos brinda una actuacion ¨salvaje¨, nos permite adentrarnos en lo mas profundo de este ser, logrando estremecer al publico.
Lluvia constante habla de amistad, la fidelidad, los valores, el honor y la lealtad. Pero en donde también hay una gran carga de lo Religioso: la confesion, la culpa, la responsabilidad, la inocencia, el pecado y la redencion son elementos que van cobrando cada vez mayor importancia durante el transcurso de la pieza.
Lluvia Constante es un espectáculo necesario en la cartelera porteña, una obra que propone actuaciones comprometidas (que sacan lo mejor de dos notables actores), un texto – como se dijo anteriormente - intenso, emotivo, visceral, y con una impecable direccion de Javier Daulte. Un espectáculo en el cual es imposible que no dejarse atravesar. Una clase magistral de Teatro.